El F2003-GA, el Ferrari con el que Michael Schumacher ganó su sexto Mundial de la Fórmula 1, ha sido comprado por 14,87 millones de euros en una subasta realizada por Sotheby’s en Suiza. Se convierte así en el monoplaza más caro de la historia de la F1 moderna.
Este modelo de la Scudería se considera el coche más exitoso de la historia del ‘Gran Circo’. Ferrari lo introdujo en la cuarta carrera de la temporada 2003 tras un difícil inicio y se convirtió en el monoplaza de referencia. De las 10 carreras que compitió con el chasis con el que ha sido vendido (modelo 229), los italianos ganaron siete de los diez grandes premios disputados (6 de Schumacher y 1 de Barrichello).
Con él Michael Schumacher ganó aquel Mundial. Además, el monoplaza de 2004 fue basado también en este modelo, año en el que Ferrari también se llevó el campeonato con el piloto alemán.
El monoplaza ha sido identificado por la propia marca Ferrari como el coche original, que conserva todas sus piezas de competición, que puede funcionar perfectamente y que solo ha recorrido 240 kilómetros más desde su última carrera oficial.
Los 14,87 millones de euros le convierten en el Fórmula 1 moderno más caro de la historia, doblando a los 7 millones que costó el Ferrari 2001 del propio Schumacher, pero no de todos los tiempos. El Mercedes W196 de 1954 de Juan Manuel Fangio sigue siendo el monoplaza más caro, ya que fue vendido por 22 millones y medio de euros.
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