En un nuevo episodio de “
” abordamos el doble homicidio de una joven pareja de músicos de Paraíso de Cartago
Link de este episodio en Spotify:
05 de junio de 2025. Lo que era una salida en pareja normal, pasar una tarde en una finca, tomar fotos y compartir momentos justos dio un giro inesperado cuando Sebastián de 16 años y Valeria de 15 años, fueron atacados por un hombre quien los asesinó y posteriormente enterró sus cuerpos para según él ocultar este crimen.
En este episodio de Expediente Cero 43, contamos con la participación de Alberto Palma, quien para el momento de los hechos se desempeñaba como jefe de la Delegación Regional de Cartago del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y Beatriz Arguedas, especialista de escena del OIJ de Cartago, quienes ahondaron sobre este caso.
“Ese domingo 13 de enero del año 2014, la pareja sale a caminar, a tomar algunas fotografías con una cámara que a la joven Valeria le habían regalado para Navidad; Sebastián, pasa por ella a su casa en Paraíso de Cartago y van caminando en apariencia al Jardín Lankester para tomar algunas fotografías. Luego de esa tarde ya no se sabe más de ellos y por la noche, ya después de las siete de la noche, es cuando los familiares comienzan a preocuparse de que dónde podrán estar. Los llaman a sus celulares y ninguno de los dos contestan”, recordó durante este podcast, Alberto Palma.
A raíz de la preocupación de los familiares, estos acudieron a la sede del OIJ e interpusieron la respectiva denuncia por desaparición. Es en ese preciso momento que los agentes del OIJ de Cartago inician con las respectivas diligencias de investigación.
El jefe policial también mencionó, que ambos eran dos personas tranquilas, inclusive pertenecían a la Escuela de Música de Paraíso de Cartago, no tenían ningún antecedente de alejamiento de hogar y eran buenos jóvenes, era una situación atípica.
Por su parte la investigadora Beatriz Arguedas, agregó durante el episodio de Expediente Cero 43, que una información que les brindó un compañero de Sebastián, les ayudó a orientar la investigación y el hallazgo de unos artículos de los ofendidos su de importancia para el caso.
“Uno de los compañeritos nos dice que Sebastián llegó en horas de la mañana y le dijo que iba a salir con Valeria en la tarde y que iban a ir al campo de flores. Esa es una de las informaciones”.
El campo de flores es precisamente un lugar en Paraíso, conocido también como Cerro Bambú o Circo Bambú, un lugar tipo mirador, que tiene unas vistas a campos y cultivos, utilizado por muchas personas para ir a sentarse a ver atardeceres.
Razón por la cual amigos de la pareja fueron al sitio para ver si lograban ubicar a la pareja; realizaron un rastreo en la zona y ubicaron varias pertenencias de Sebastián y Valeria.
Según recordó la investigadora, ese lunes los muchachos siguieron buscando dentro de la finca y en la parte de abajo, encontraron unos rastros de sangre. Inmediatamente nos trasladamos al lugar donde empezamos a hacer nuestro trabajo de resguardo y recolección de evidencia.
“Fuimos a la parte donde se ubicó el rastro de sangre, que está aproximadamente a unos 75 metros, es de difícil acceso porque es un terreno en desnivel que va a dar a la parte de una quebrada, un río que cruza la finca; al hacer un rastreo para ver que otro indicio ubicamos en el sitio, es donde nos llevamos la sorpresa que ubicamos tierra removida. Además de eso, ubicamos algunas prendas”, agregó la investigadora Arguedas.
Lo que inició como una investigación por desaparición dio un giro inesperado cuando los agentes del OIJ de Cartago, removieron esa tierra y a unos cuantos centímetros observaron una extremidad humana.
“Cuando vemos que efectivamente tenemos una persona, el lugar lo dejamos protegido y seguimos haciendo rastreo. Comunicamos a la oficina para que procedieran con las coordinaciones con todas las autoridades, cuerpo legal, médico y todo lo que corresponde ante este tipo de evento. Porque hay que conformar un equipo de trabajo interdisciplinario”, manifestó la especialista.
En la escena los agentes de investigación continuaron haciendo un rastreo y al otro lado del río se llevaron la sorpresa que ubicaron otro lugar con tierra removida. Precisamente una especie de rectángulo.
Beatriz agregó durante el podcast, que se procedió a excavar poco a poco y a los pocos centímetros se logró determinar que había otro cuerpo.
Preliminarmente se sabía que se trataban de Valeria y Sebastián, pero lo que era un interrogante para los investigadores era lo que había ocurrido, qué fue lo que pasó para que los mataran y los enterraran ahí.
El cuerpo del muchacho presentaba heridas de arma blanca en cuello y espalda, además de dos impactos de proyectil de arma de fuego en su cabeza, mientras que la muchacha presentaba una herida contusa y una de bala en su cabeza.
Al inicio por lo descubierto en el potrero, se presumía que el móvil del crimen se trataba de un ataque sexual. Pero, posteriormente se logró determinar que un asalto fue lo que llevó al homicidio de la pareja.
Alberto Palma manifestó durante este capitulo de Expediente Cero 43, que al día siguiente que se desenterraron los cuerpos un sujeto se
presentó con su padre a los Tribunales de Cartago y confesó voluntariamente que él fue quien asesinó a la pareja de novios.
“De inmediato le indiqué que guardara silencio y me fui a buscar a un fiscal y a un abogado defensor”, agregó Palma.
Durante el allanamiento a la vivienda del sospechoso de apellido Ramírez de 21 años, se logró ubicar la cámara fotográfica que pertenecía a Valeria, así como el arma de fuego que utilizó para darle muerte a los jóvenes de músicos.
Finalmente, José Gerardo Ramírez Obando, fue declarado ese mismo año culpable de los delitos de homicidio calificado y robo agravado. Fue condenado a 65 años de cárcel.
Usted puede escuchar este sexto episodio de esta cuarta temporada de Expediente Cero 43, donde podrá conocer más a profundidad los aspectos más particulares de esta investigación narrados por jefe policial y la encargada de liderar esta investigación.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...